Existen muchas cosas que se  deben tomar en cuenta cuando se identifican escenarios en los cuales se utilizarán aplicaciones móviles. Por ejemplo el dispositivo que se utilizará para implementar la solución. La funcionalidad más compleja que se agrega a este tipo de soluciones tiene relación  con la administración de las comunicaciones y el intercambio de información entre la aplicación y los servidores de Back-End, ya que se tiene en estos momentos conexiones poco confiables o intermitentes.

Este tema obliga al desarrollar capacidades de trabajo Off-line en cada dispositivo. Para poder desarrollar aplicaciones que trabajen Off-line se debe tener en cuenta aspectos cómo Cache Local de datos, sincronización, transacciones basadas en compensaciones, etc. 

Este problema es conocido como Occasionally Connected Computing (OCC). Para hacer aplicaciones que se comporten bien ante los desafíos del OOC existe un modelo llamado OCC MODEL. 

Las aplicaciones OCC son la nueva generación de aplicaciones empresariales para la plataforma móvil. Las aplicaciones se ejecutan en los dispositivos, no como el Browser que obliga a estar conectado siempre;  donde se ingresan datos, se maneja la consistencia y se le da al usuario la sensación de trabajar sin importar el estado de la conectividad. Los criterios que establecen la diferencia entre una aplicación OCC y cliente servidor o basadas en Browser son:

Ø      Una aplicación OCC, sigue trabajando tenga o no conexión con los servidores centrales.

Ø      La aplicación OCC, trabaja con un Cache de datos local en ausencia de conectividad.

Ø      Las colas de la aplicación actúan al fallar la conectividad (Mensajería asíncrona)

Ø      La aplicación detecta cuando existe conectividad y procesa las colas de mensajes y refresca el Cache de datos local. (Publicación y Suscripción)

Las aplicaciones que cumplen con estos criterios son OCC.